miércoles, 28 de enero de 2015

6 cosas que te pueden pasar cuando corres... y todas me pasaron a mi

 
A todos nos pasan "batallitas" corriendo carreras. Hoy me he puesto a hacer un poco de memoría. Y entre todas las cosas que me han pasado alguna vez he seleccionado estas, porque, todas me hacen esbozar una sonrisa.
 
 
1.- Mi orgullo malherido.

19/09/2010 Villava (Navarra) Mi primera carrera popular. Contra todo pronóstico no voy el último. Queda un kilómetro para meta. Allí adelante veo a un niño de unos 12 años. Le alcanzo sin problemas. Va asfixiado. Me da pena adelantarle y me quedo con él. Le animo. Le digo que no queda nada...
 
La meta es en un colegio, supongo que en su colegio. Cuando quedan 100 metros se arranca el crío un sprint como si le persiguiera la policía. Me quita hasta las pegatinas. Se me queda cara de tonto. El niño entra entre la ovación del público. Novatilo, cautivo y desarmado entra en meta intentando contener su orgullo malherido.
 
 
2.- El invento revolucionario

29/09/2012. Orkoien (Navarra) Carrera pequeña. En un pueblo. A las afueras de Pamplona. Unos 50 corredores. Voy a estrenar un invento revolucionario. No
agujerees más camisetas. Nada de imperdibles. Me han recomendado la solución definitiva. Esta vez llevaré sujeto el dorsal con unos imanes...
 
Es una carrera sencilla. Pagas dos euros y unas voluntarias te dan tu dorsal. Con el número recién pintado a rotulador. Yo, más chulo que un ocho, me pongo el dorsal con los imanes. En la primera ráfaga de viento, os juro que en la primera, el dorsal sale volando. Y vuela, y vuela, y sigue volando hasta posarse plácidamente en la azotea de una casa. De nuevo, con mi orgullo malherido, tengo que acudir a la mesa de dorsales, a que me hagan uno nuevo, y de paso, coger unos imperdibles.
 
 
3.- El peligro de los tortolitos

22/10/2011. Bilbao. Media maratón del Bilbao Night Marathon. Estamos llegando al km20. Llevo un rato rodeado de la misma gente. A mi lado corre una
pareja. El chico va fastidiado. La chica va más fresca, animándole. Ella, todo amor, se cruza en los avituallamientos para coger cosas para su chico.
 
Digo bien, se cruza y se descruza delante de mí. Harto de verla hacer zigzag, decido adelantarla. Justo en ese momento, la chica gira hacia la izquierda. Se tropieza con mi pierna y me hace la zancadilla perfecta. Hago un triple mortal y medio carpado adelante que haría delirar a Ana Tarrés. Me meto un morrazo de impresión contra el asfalto. Puntuación. Despegue: ten points, Vuelo: ten points, Choque con el Asfalto: ten points
 
 
Así quedaron camiseta y dorsal
tras el aterrizaje
 
 

4.- Novatillos y cabezudos


28/05/2011. Barañain (Navarra). Es día de fiesta en el pueblo. Es la primera carrera de Novatilla. Corro con ella. Vamos un grupo de gente a cola de carrera.
Y cerrando ese grupo un cabezudo. Un cabezudo disfrazado de abuela de runner-escoba... qué cosas.
 
Giramos una esquina del recorrido. Oigo un ruido "clinc- clinc". Y el cabezudo, o mejor dicho, el chico que va dentro del cabezudo  suelta un juramento.
 
"Mecaguen la leche, se me han caído las llaves".
 
Estimado lector, imagínese la imagen. Me paro y me pongo a buscar las llaves. Novatillo y un cabezudo-abuela agachados entre los coches aparcados buscando unas llaves. Casi un minuto más tarde aparecieron las llaves... Afortunadamente, no había cámaras...
 
 
5.- Abrazando a papá
 
21/04/2013. Burlada (Navarra) Es el único diez mil homologado de Navarra. Voy a fuego. Busco mi MMP. Llego al kilómetro 5. Ahí está el avituallamiento. Voy hacia la izquierda, hay menos gente. Al fondo hay una mesa con una voluntaria. Es la última mesa, pero está vacía de corredores. Miro a la voluntaria. Tiene una botella de agua en la mano. Perfecto. Cogeré el botellín rápido y para adelante.
 
Cuando estoy a diez metros la voluntaria mira al corredor que llevo delante y grita 
 
Ánimo papá!".

Y al corredor no se le ocurre mejor idea que pararse y darle un abrazo a su hija...
Y Novatillo pasa de largo sin poder alcanzar la botella de agua, mientras la voluntaria le planta dos besos a su padre.
 
 
6.- Conductores suicidas
 
09/03/2014. Media maratón de Santander. Antes de empezar voy a guardarme un gel en el bolsillo del pantalón. Descubro que se me ha descosido el bolsillo. No creo que aguante el peso del gel y el traqueteo del correr. Ahí no lo puedo guardar. ¿Dónde lo guardo? Voy a buscarle una nueva utilidad a la gorra fosfy. Ya sé. Me pongo el gel en la cabeza y con la gorra encima no se moverá.
 
Km15. En pleno paseo de Pereda, me molesta la gorra. Ni acordarme del gel. Agarro la visera para cambiarla de posición y el gel, lógicamente, se cae al suelo . Y yo por mi gel ¡¡¡maaato!!.

Hago lo que nunca hay que hacer... Me paro, me giro e incluso corro 5 metros en dirección contraria. No sé qué pensáis vosotros, si ir a 5'/km es ir rápido o despacio. Pero doy fe de que... ponerse de frente a un pelotón de runners a esa velocidad, acojona, y mucho. Aunque sea sólo para coger un gel del suelo.
 
 
 
 

6.-

martes, 20 de enero de 2015

"Es que.... estoy preparando maratón"

 
 
NOTA DEL AUTOR.  Esta entrada está basada en sobrecogedores hechos reales.
 
 
Seguro que está sucediendo ahora mismo. En cualquier lugar del mundo. Os recuerdo que el mundo está plagado de no corredores. Estás hablando con un grupo de gente. Me da igual donde. En una oficina, en una fábrica, en el bar, en clase de bailes de salón o en la panadería de la esquina... De pronto alguien te mira, así como de soslayo y te dice eso de...
 

"Ayer te vi corriendo por el parque...
 Ayer. ¡Con el frío que hacía ayer y tú allí corriendo!".
 

Y se genera un silencio. Un silencio incómodo. Difícil de llenar. En cualquier thriller sonaría música de fondo, de esa que genera ansiedad. Tu cerebro, presa de esa misma ansiedad busca una respuesta. ¿Cómo explicar qué hacías tú allí ayer?. Y sólo encuentras esa frase, que tú sabes qué quiere decir... pero que sólo unos pocos entienden.
 

"Es que... estoy preparando maratón."
 
 
 
 
Y, de pronto descubres que dentro de ese grupo que te escucha está....
 

El que hizo deporte y lo dejó

Te mira con cierta admiración. Hizo deporte cuando era joven. Aunque ya no sigue haciéndolo. Más o menos recuerda qué es un maratón. Le suena que es una cosa de negritos que corren rápido y lejos. Y te mira bien. Con respeto. Quizás incluso imaginando que tú eres uno de esos negritos. Titubea un poco pero te  pregunta cosas sobre entrenamiento. Tú intentas no venirte mucho arriba. Intentas no contarle que ayer hiciste 4km cc + 4*1,5km + 2km cc (posiblemente porque ni tú sabes desentrañar el jeroglífico) Pero le vendes el producto. Le vendes lo dura y larga que es la preparación del maratón. Le añades unas pizcas de heroismo. Incluso utilizas frases del tipo "el maratón me ha cambiado la vida". Tienes una reputación maratoniana que mantener.
 

El que fue maratoniano

Ni lo sabías. Fue hace tanto tiempo que él casi lo tiene olvidado. Y hace mucho que no lo cuenta. Pero al nombrar la palabra maratón se le enciende la mirada. Se queda pensativo y recuerda sus tiempos de corredor. Se dividen en dos subespecies. El que tiene una buena marca te la cuenta rápidamente. El que no la hizo tan buena te recuerda que fue hace muchos años. Con este no puedes chuliquearte tanto. Estás a punto de preguntarle si "el dolor es temporal pero la gloria es para siempre". Pero te cortas. Aunque nace entre vosotros una especie de solidaridad.
 
 
El que te quiere bien.
 
Es el típico al que le caes bien. Conectáis. Quizás sin más porque a los dos os gusta el encaje de bolillos. Quizás sois fans de la Campanario o tenéis en común que vuestro abuelo fue tornero-fresador. Al menos no te mira raro. Algo es algo. Eso sí, cuando le hablas de un maratón siempre pregunta lo mismo "Y eso, ¿cuántos kilómetros son?", Y cuando contestas que 42 pone cara de estupor. La cara de estupor del que es incapaz de calcular qué es eso. La misma cara que pondría si la respuesta hubiese sido 29 kilómetros u 83 kilómetros.
 
 
El que ha venido a hablar de su libro.
 
De este no te preocupes. No te va a escuchar. Da igual lo que le cuentes. De hecho, en cuanto dices la palabra maratón empieza a meterte una chapa infinita sobre su viaje a Grecia. Empiezas hablando de maratón y acabas oyéndole hablar de dónde comer la mejor moussaka de Atenas. Ni te deja meter baza. Él ha venido a hablar de tu libro, y tú, a callar.
 
 
 
El que nunca ha hecho deporte.
 
Es un tío fiel a sus principios. Un gordo orgulloso de ello. Ya puestos, fuma y bebe y hace ostentación de ello. Es de los que ponen a prueba tu vocación de persona deportista. En cuanto oye la palabra maratón se parte de la risa. Sin disimulos. Es más, hace comentarios aliñándolo. Del tipo "Si hubiera un maratón de comer pintxos de txistorra, yo lo ganaría". Y para confirmar sus teorías, se levanta, va a la barra y pide un par de churros más, y otro café, o mejor un carajillo....
 

Quizás por eso, y quizás porque le importa a poca gente, cada vez cuento menos eso de que "estoy preparando maratón".
 

Pero como sé que a vosotros os importa, os lo digo...
Estoy preparando maratón.Y estoy preparándolo agusto.
Quedan aún dos semanas chungas y su tapering, pero estoy contento.
Me veo bastante suelto en las series y bien de caja en las tiradas largas.
Pero ya sabemos de que va esto. No lanzaremos las campanas al vuelo.
Sólo estar en la salida ya será un triunfo.Y estar en la llegada, la guinda.
 
 
NOTA. Los cinco tipos de interlocutor arriba mencionados no intentan ser un listado exhaustivo, pero coinciden casi al 100% con una experiencia vivida esta misma semana.
 

martes, 13 de enero de 2015

Preparando un maratón by Novatilla

 
Y parecía que estaba lejos eso de Sevilla en febrero...
 
 
Y ya estoy metida en el mes más duro de la preparación para Sevilla. Sí, es el más duro. Pero es la parte del plan que a mi más me gusta. Es la hora de hacer volumen, mucho volumen. Como me gusta. Poner el reloj en marcha y sólo vigilar para pararlo en los kilómetros que te marca el plan de entrenamiento. Sin preocuparme tanto de tiempos o de ritmos. Sí, sé que los ritmos son importantes, pero para mi, es mucho más importante meter kilómetros a mis piernas. Y en ello estamos.
 
 
A todo esto, cuando me apunté a Sevilla pensé. Vale, maratón en febrero. Eso quiere decir que me pasaré todo el invierno en Pamplona entrenando. Uf, ¡no sabéis qué tiempo suele hacer en Pamplona en invierno!. Me veía entrenando bajo la lluvia, la nieve, con viento, con temperaturas bajas… pero no por ahora nos está respetando. No sé que ha pasado pero Mordor es menos Mordor.
 
 
¿Os puedo contar la verdad? A mí lo que me gustan son las tiradas largas. No  me gusta correr rápido. Bueno, al menos a lo que yo le llamo rápido. Claro que me gusta que cuando pite el GPS y ese kilómetro haya salido un poquito más rápido de lo que creía. Pero hacer carreras cortas, hacer series, esa sensación de tener el corazón en la boca... Ufff. No. No está hecha para mi. Pero siempre os he leído eso de que hay que hacer series porque así se mejora... Manos a la obra, un día a la semana series, y sí que noto mejoría.
 
 
Lo que no sé es qué objetivo tengo... No lo tengo claro.... En Valencia era mi primera maratón y mi objetivo claramente era sólo terminar.. En Rotterdam estuve buena parte de la preparación lesionada y mi objetivo fue terminar....
 
 
Y ahora... ¿pues intentaremos bajar de marca, no? Tengo 4h14’ de MMP y me veo mejor. Estoy entrenando mucho mejor que otras veces. Pero ya sé de qué va esto. En una maratón puede pasar cualquier cosa y no me atrevo a calcular….
 
 
En cualquier caso, este año nuevo pinta muy bien. Promete muchas cosas. 2014 lo terminé genial bajando mis tiempos y disfrutando muchísimo las carreras a las que fui, y este año no puede empezar mejor. Primera carrera, en Sevilla, y casi nada, un maratón.
 
 
Ya hay ganas, ganas ya de estar allí y de poneros cara a mucho de vosotros….
 
 
¡Vamos!

A ver si en Sevilla puedo dedicaros una foto como esta.


  

viernes, 2 de enero de 2015

La estresante crónica de #3SanSilves3. El gili-reto


06.30h Amanece el día del gili-reto.
06.35h Primera ducha del día.
06.40h
Desayuno de un miércoles cualquiera.
06.41h Si no lo tuiteas no existe. Tuiteo un poco sobre "#3SanSilves3 el gili-reto".
 
07.35h Ya trabajando. He pedido horas libres. A las 11.10 saldré del trabajo.
 
11.15h Consigo desenredarme de las trampas de última hora que me ha tendido mi jefa.
11.24h A estas horas debería pasar un autobús. Nada
11.28h.Tampoco llega el bus
11.30h.Al fin consigo coger el autobus ¿llegaré?
11.35h Ay, qué justo voy..
11.40h
A ver si no llego... ¡qué nervios!
11.45h Tres minutos y llego. Esto sí que es un gili-reto

 
11.50h Momento exhibicionista. Cambiarme la ropa. Ponerme el dorsal. Ponerme el sombrero de Papa Noel. Tirar la mochila en el coche de Josetxo (¡¡gracias!!) y justo de vuelta suena el txupinazo de salida.... ¡por los pelos!
 
 
12.00h San Silvestre de Barañain.
4kms. Gratuita, con agua y almuerzo final. 450 corredores. Muy buen ambiente. Cientos de disfraces. Sol. 4 kilómetros de palique y risas a 5'/km raspaos. ¿quién da mas?
 

Aquí, aquí ¡foto!
Ese postureo que no falte
fotos cortesía de @ladygambrins
 
 
El muelle de mi gorrito con una flexibilidad que ni Nadia Comaneci
(las señoras de detrás muy interesadas en mi carrera)
 

Novatilla, Josetxo, Alejandro y el del gorrito raro
Compañía de lujo

 



Novatilla también se marcó dos San Silvestres el mismo día.
Y por la mañana corrió rápido, rápido...


12.40h Almuerzo gratuito. Un pintxo de txistorra y otro de tortilla de patata. Dieta runner le llaman. Fin de la primera parte del gili-reto.
13.00h Segunda ducha del día.

14.00h Lasaña para comer y siesta reparadora.
 
 
17.00h Cambio de planes. Bajaré a la segunda salida trotando. Total, sólo son 3 kilómetros.
17.20h Camino de la salida. Vestido con el mismo gorro de por la mañana.
 
 
 
NOTA IMPORTANTE
Nunca corráis por la calle con un gorro extraño de Papá Noel.
Los niños te apuntan con el dedo, las señoras te miran extrañadas y
algunos coches tocan el claxon a tu paso. Doy fe.
 
 
17.45h Recojo el dorsal. Me junto con Álex. Inevitable contar batallitas.
17.46h Calentamos. Le aviso que voy a ir a fuego. Sin chuliqueos
18.00h Aún no dan la salida. Tengo 60 minutos para correr un 5k, subir 4km cuesta arriba, cambiarme de camiseta y gorro y salir en la 3º San Silvestre.
 
 
18.04h San Silvestre de Burlada.
4,800 metros. Gratuita, con avituallamiento final y ¡¡camiseta!!. 600 corredores. Mucho ambiente. Mucha gente disfrazada. Corro como si no hubiera un mañana. 19'23'' a 4'02''/km Un minuto menos que el año pasado. Nunca había corrido nada tan rápido. Y eso que ha habido chocado múltiple de manitas... como debe ser. ¿quién da más?
 
 
 
Alex y yo preparados para la batalla. Gestos de concentración
 
 
 
 
Utilizando mi detector de cámaras para el postureo
 
 
 
La cara de mala leche sólo es por la anaerobia
Qué bonito el paisaje de fondo
 


Intento de sonrisa entrando en meta.
Pero a esos ritmos no me concuerdan ni los labios
 

 

 
18.25h Cojo un botellín de agua y vuelta a casa. No espero a Alex, lo siento, voy justo de tiempo.
18.26h Me esperan 3,5 kilómetros cuesta arriba (este es realmente el gili-reto)
18.45h Me cambio de camiseta y gorro en el portal. Baja la Novatilla y corremos 500 metros hacia la salida de la última San Silvestre
 
 
19.00h San Silvestre de Pamplona.
6.100 metros. 10 euros. Camiseta. 4000 corredores con dorsal, sólo Dios sabrá cuántos sin dorsal. EL MAYOR CAOS DE CARRERA QUE HE CORRIDO JAMAS. Ningún control a los "sin dorsal". Niños en silletas, niños sin silletas, perros, patines... Un circuito estrecho en el que en ningún momento se puede correr. Y para colmo un tapón a 200 metros de meta.
 
 
Antes muertos que sencillos, los Novatillos.
 

El gorro de arbol de Navidad con luces y cascabeles, una gozada.
No sé cuántas manitas pude chocar,
ni cuantos niños saludé cuando gritaban eso de
¡mira, un árbol!
 

¡Mira un árbol!
¡Cómo brilla!

 
 
 
 
19.50h Un #tontomotivado es un #tontomotivado y un gili-reto no se abandona así como así. Después de estar más de un cuarto de hora metido en un tapón para alcanzar la línea de meta, la cruzo. Firmo la peor marca de la historia. 50 minutos para un 6 kilómetros
 
 
 
Fotografía de fin de gili-reto.
NOTA. No nos patrocina Aquarius
 

- 3 carreras
- 2 novatillos
- 2 gorros navideños
- Muchos amigos
- 21.900 metros corridos
- Cientos de manitas chocadas
- Miles de sonrisas repartidas y recibidas

Bien valen la pena.


20.00h Tercera ducha del día. Despedida y cierre.